Saltar al contenido
PsicoEmotividad©2024 – Todos los derechos reservados

Un Curso de Milagros Lección 84

Un Curso de Milagros Lección 84: Superación del resentimiento mediante el amor

Lección 84 UCDM

Éstas son las ideas para el repaso de hoy:


El Amor me Creó a Semejanza de Sí Mismo

He sido creado a semejanza de mi Creador. No puedo sufrir, no puedo experimentar pérdidas y no puedo morir. No soy un cuerpo. Hoy quiero reconocer mi realidad. No adoraré ídolos ni exaltaré el concepto que he forjado de mí mismo para reemplazar a mi Ser. He sido creado a semejanza de mi Creador. El Amor me creó a semejanza de Sí Mismo.


Aplicaciones Prácticas de la Identidad en Amor

Las siguientes variaciones te pueden resultar útiles para las aplicaciones concretas de la idea: Que no vea en esto una ilusión de mí mismo. Mientras contemplo esto, quiero recordar a mi Creador. Mi Creador no creó esto como yo lo estoy viendo.


El amor no abriga resentimientos

Los resentimientos son algo completamente ajeno al amor. Los resentimientos atacan al amor y obscurecen su luz. Si abrigo resentimientos estoy atacando al amor y, por ende, atacando mi Ser. De este modo, mi Ser se vuelve un extraño para mí. Estoy decidido a no atacar a mi Ser hoy, de manera que pueda recordar Quién soy.


Variaciones para Superar el Resentimiento

Estas variaciones de la idea te resultarán útiles para las aplicaciones concretas: Esto no justifica el que niegue a mi Ser. No me valdré de esto para atacar al amor. No dejaré que esto me tiente a atacarme a mí mismo.


Reflexiones sobre la Lección 84 de Un Curso de Milagros: El Camino hacia el Amor Propio y la Liberación del Resentimiento

Reconociendo Nuestra Creación en Amor

La Lección 84 de Un Curso de Milagros nos invita a una profunda reflexión sobre nuestra verdadera naturaleza y propósito. En su núcleo, nos recuerda que hemos sido creados a imagen y semejanza del Amor, un principio que desafía nuestra identificación con el sufrimiento, la pérdida o la mortalidad. Al afirmar que «El Amor me creó a semejanza de Sí Mismo», la lección nos anima a despojarnos de las falsas percepciones de nosotros mismos como cuerpos limitados y mortales, reconociéndonos como seres eternos y llenos de amor.

La Práctica de Ver Más Allá de las Ilusiones

La aplicación práctica de esta idea nos guía a ver más allá de las ilusiones que hemos creado sobre nosotros mismos y el mundo. Nos invita a contemplar nuestra existencia y nuestras experiencias desde una perspectiva más elevada, recordando a nuestro Creador y rechazando cualquier visión que contradiga nuestra esencia divina. Esta práctica nos ayuda a liberarnos de los ídolos y conceptos falsos que hemos erigido en lugar de nuestra verdadera identidad.

La Incompatibilidad del Amor y el Resentimiento

Al avanzar hacia la comprensión de que «El amor no abriga resentimientos», la lección establece un vínculo claro entre el amor y la incapacidad de sostener resentimientos. Los resentimientos, vistos como ataques al amor, nos alejan de nuestra verdadera naturaleza y nos hacen extraños a nosotros mismos. La determinación de no atacar nuestro propio ser es un paso crucial hacia el recordatorio de quiénes somos realmente: seres de amor puro, destinados a vivir sin las sombras que los resentimientos proyectan sobre nuestra luz interna.

Aplicaciones para Superar el Resentimiento

Las variaciones sugeridas para aplicar esta enseñanza en situaciones concretas nos muestran cómo evitar justificar el resentimiento o usarlo como un medio para negar nuestra verdadera función. Nos enseñan a resistir la tentación de atacarnos a nosotros mismos o al amor, lo que nos lleva a una práctica más consciente de la autocompasión y el perdón, tanto hacia nosotros mismos como hacia los demás.

Conclusión: Un Llamado a la Autenticidad y la Paz

Un Curso de Milagros Lección 84 es un llamado a vivir desde nuestra autenticidad, reconociendo y abrazando nuestra creación en amor. Nos motiva a disolver las barreras del resentimiento que nos separan de nuestra esencia y de los demás, guiándonos hacia una vida de paz, felicidad y auténtico autoconocimiento. Al recordar y vivir según nuestra única función —ser expresiones del amor divino—, nos abrimos a la experiencia de la dicha verdadera y eterna, tal como fue concebida para nosotros.

Configuración